Las impresoras 3D ya están presentes en muchos colegios como una herramienta tecnológica más para mejorar la educación.
Seguimos buscando iniciativas interesantes en el mundo de la educación y el uso de las tecnologías de código abierto como la impresión 3D. La semana pasada encontramos el ejemplo del Colegio San Francisco de Paula, en Sevilla, cuyo Departamento de Plástica y Tecnología, ha trabajado en un proyecto con la impresora 3D aplicada al aula.
Dos de sus alumnos han diseñado un prototipo de lápices para las pizarras del centro, los han fabricado con una Makerbot Replicator y, tras ser testados por algunos profesores, serán utilizados en todas las aulas del centro, consiguiendo así, y según palabras del centro, «revertir el esfuerzo de los alumnos en el beneficio de la comunidad educativa».
San Francisco de Paula es un colegio privado y laico, en Sevilla, que se esfuerza por incorporar las nuevas tecnologías en todo su programa educativo: pizarras digitales, un campus virtual para profesores, alumnos y tutores, tabletas y clases de informática desde los tres años.
Para diseñar estos punteros, han usado el software SketchUp y Makerware, como nos cuentan en esta entrada de su blog.
Un ejemplo más de cómo la impresión 3D puede ir incorporándose en los programas escolares, y del uso específico que se le puede dar para mejorar la experiencia educativa. Algo que nosotros intentamos fomentar el curso pasado en el I.E.S Pablo Díez de Boñar, con el taller: Teen Makers.
Rosa Coma
29 octubre, 2013
Me parece una idea muy buena , es preciso que los niños crezcan y se formen desde pequeños con la nuevas tecnologías